Cómo proteger la identidad de tu hijo

En nuestro mundo de alta tecnología, el robo de identidad es una realidad aterradora y, sorprendentemente, nuestros pequeños pueden ser los más expuestos. Según la Comisión Federal de Comercio , los ciberdelincuentes suelen atacar a los niños, aprovechándose de sus impecables historiales de crédito y de la probabilidad de que el robo pase desapercibido durante mucho tiempo. Esto podría conducir a un camino financiero difícil en el futuro de tu hijo. Como padres y tutores, debemos convertirnos en caballeros de brillante armadura, ya que el 73% de las familias con hijos se ven afectadas por el robo de identidad infantil y el fraude subsiguiente. Este artículo se adentra en los efectos del robo de identidad infantil y ofrece una fórmula de prevención.

Efectos del robo de identidad infantil:

1. Caos crediticio: El ladrón podría utilizar la identidad de tu hijo para abrir líneas de crédito, pedir dinero prestado o acumular grandes deudas, dejando a tu hijo con una mala calificación crediticia que podría afectar a su capacidad para obtener préstamos o hipotecas en su vida adulta.

2. Antecedentes penales: En algunos casos, un ladrón podría utilizar la identidad robada para actividades ilegales, lo que podría acabar con los antecedentes penales de tu hijo.

3. Empleo: Un historial crediticio dañado puede influir en futuras oportunidades de empleo, ya que algunos empleadores realizan comprobaciones de crédito como parte de su proceso de contratación.

4. Daño emocional: Descubrir un robo de identidad puede causar mucha preocupación y estrés tanto al niño como a la familia.

Entonces, ¿cómo puedes proteger la identidad de tu hijo para que no se la roben?

Hay ciertas cosas que puedes hacer para que tanto el mundo online como la identidad de tus hijos estén más seguros y protegidos, aunque a veces parezca inútil. No te preocupes, aquí tienes una lista de medidas prácticas que puedes tomar para proteger a tus hijos:

• Mantén los secretos, en secreto: guarda bajo llave documentos sensibles, como certificados de nacimiento y tarjetas de la seguridad social. Ten cuidado al dar los datos personales de tu hijo, y hazlo solo cuando sea necesario.
• Enseña a tu hijo: Asegúrate de que tu hijo conoce la importancia de la privacidad y los riesgos de compartir información personal. Esto incluye los modales online, la detección de estafas de phishing y la comprensión del peligro de chatear con extraños.
• Vigilar la red: Vigila el uso que tu hijo hace de Internet y asegúrate de que tiene cuidado con lo que publica. Configura la privacidad en las redes sociales para mantener su identidad a salvo.
• Comprueba su crédito: Los niños no deberían tener un informe de crédito a menos que se les haya abierto una cuenta. Comprueba regularmente el informe crediticio de tu hijo para asegurarte de que no existen cuentas fraudulentas.
• Software de seguridad: Asegúrate de que los dispositivos de tu hijo están protegidos con el software de seguridad más reciente, incluida la Protección de identidad.   Las actualizaciones periódicas son cruciales para protegerse de las nuevas amenazas.

Navegar por Internet es como un tiovivo: es muy divertido, pero la seguridad es fundamental. Puede que nuestros pequeños sean unos magos de la tecnología, pero su inocencia puede convertirlos en objetivo de los delincuentes online.

Igual que les enseñamos a atarse los cordones de los zapatos, debemos enseñarles a proteger su identidad en Internet. Háblales de la lista de «no compartir»: nombres y apellidos, direcciones de casa y nombres del colegio están prohibidos. Y no te olvides de esos códigos secretos que llamamos contraseñas: ¡tienen que ser tan complicadas como el acertijo de un dragón!

Mantén la conversación sobre la seguridad en Internet y haz que sea tan habitual como su cuento favorito. Anímalos a compartir con ellos cualquier momento del tipo «Érase una vez, vi algo raro en Internet».

No dejes de utilizar la magia de la tecnología en tu beneficio. Utiliza controles parentales en dispositivos y aplicaciones para mantener su reino online a salvo y seguro. Actualizar regularmente estas defensas es tan esencial como su vacuna anual contra la gripe.

Recuerda que Internet es como su patio de recreo. Es nuestro trabajo asegurarnos de que puedan balancearse alto y deslizarse rápido, aterrizando siempre de forma segura. Trabajando juntos, podemos asegurarnos de que nuestros hijos exploran, aprenden y crecen en un mundo online seguro.